Capítulo 72

     Corren hacia la gran muralla que se alzaba por encima del cada vez más denso follaje del bosque. Casi los ven. Varios guardas con armas de fuego de alto calibre custodian las entradas. Los cuatro se esconden detrás de los árboles, esperando que nadie los haya notado al llegar. Su misión: entrar lo más sigiloso posible, buscar a James y sacarlo de ese lugar. El problema ahora es, ¿cómo lograrán siquiera entrar? Desde donde están, apenas logran ver una pequeña parte del interior cada vez que se abre una puerta. No hay manera de entrar sin ser vistos, y detectan la energía de muchas personas como para utilizar el poder de ilusión de Sasuke y Saidor. Pero hay que hacerlo.

     Alguien está cerca.

Los cuatro voltean rápidamente, preparados para pelear, pero se encuentran con solo un hombre. No muy alto, un casco de colores con máscara y una larga capa de color café.

Tierra: Wow, wow, tranquilos. *alza las manos* Vengo en son de paz.

Smoke: ¿Quién eres?

Tierra: No hay mucho tiempo- soy Tierra, Hartnes de la aldea de los Arcenial, Arnerys.

Shion: ¿Arcenial?

Tierra: Hector y Sedrik me dijeron que vienen a rescatar a su amigo *mira a Shion* hum… tú haz de ser su pareja.

Shion: ¿Eh?

Tierra: Siento una energía diferente en ti… pero, bueno, ahora no es momento para hablar de eso. (Chicos, vamos a tener que hacer una entrada de emergencia)

Shion: ¿Sabes cómo entrar?

Tierra: Lo hago todo el tiempo. *junta sus manos* En estos momentos, mis compañeros vienen en camino… será difícil…

Sasuke: Nosotros… utilizaremos ilusión para evitar que nos vean.

Tierra: Es buena idea. Pero cada puerta está fuertemente reforzada y protegida con Diamantes Leria. Evitan la teletransportación a los cuartos.

Shion: (Rayos…)

Tierra: Habrá que hacer ruido sí o sí… así que, les crearemos una distracción.

 

     Tan pronto dice eso, detrás de él aparecen cuatro personas más, con el mismo casco y capas, cada uno de un color diferente, al igual que la gema en el centro de sus cascos.

 

Tierra: Agua, Fuego, Hielo, Viento. Hoy estamos a sus servicios… y al de nuestros Arcenial.

Saidor: (Interesante… cada uno con nombre de un elemento) Vamos.

 

     Tierra voltea a ver hacia sus compañeros y asiente, ellos asienten de vuelta.

 

Tierra: Primero *junta las manos* necesitarán una imagen que los distraiga.

Smoke: ¿Hum?

 

     Comienza a susurrar unas palabras, mientras que sus manos se mueven; primero una hacia arriba y otra hacia abajo, luego en un gran círculo hasta terminar juntas otra vez. Extiende los brazos. Guarda silencio.

 

Tierra: Listo… para ellos, serán otros Arcenial más, en caso de que los vean.

Shion: (Un… hechicero también…)

Tierra: Ahora sí. Vamos.

 

     Todos asienten. Corren ahora en dirección al gran muro, hacia la puerta cerrada. Los guardas los ven y preparan sus armas, pero cada Hartnes se encarga de deshacerse de ellos, evitando así que puedan llamar refuerzos, ganando suficiente tiempo. Los cuatro hermanos se acercan a la puerta, y los Hartnes los acompañan.

 

Tierra: Desde aquí sí se pueden transportar hacia adentro, pero luego ya no podrán para ninguna habitación, todas estás protegidas con los Diamantes Leria. Nosotros distraeremos a los soldados.

Sasuke: Podemos escabullirnos ilusionando a los guardias para que no nos vean a nosotros.

Tierra: Bien. Tengan mucho cuidado. *le coloca la mano derecha en el hombro* Mucho cuidado. *haciendo énfasis en “mucho”*

Sasuke: *asiente*

 

     Todos desaparecen.

 

     Adentro de un largo pasillo metálico y oscuro, repleto de camiones y soldados. Algunos ven a los Hartnes, y dan la voz de alerta a sus compañeros. Una batalla entre estos cinco Arcenial y los soldados comienza, teniendo como ventaja su habilidad de teletransportación para evitar ser alcanzados por las balas.

     Mientras tanto, los cuatro hermanos, escondidos de los soldados, corren por el pasillo hasta llegar a otra gran puerta, la cual se encontraba abierta. Saidor y Sasuke se concentran; no podían dejar a ningún soldado por fuera. Finalmente, entran y corren intentando rastrear la energía de James.

 

     El lugar era enorme. Muy luminoso, repleto de pasillo y puertas por todos lados. Personas con batas blancas caminando de un lado a otro. Otros, llevando atados a personas parecidas a los amigos de James, y a aquellos que se hacen llamar Hartnes. Los cuatro miraban de reojo solamente, pero veían suficiente. ¿Qué era ese lugar? ¿Qué hacían exactamente con ellos? Pensar en qué le estarían haciendo a James ponía aún más ansioso a Shion. Es crucial encontrarlo.

      Escuchan ruidos detrás de ellos. Se detienen por un momento y voltean a ver; personas corriendo, tanto los que llevan bata como otros con apariencia Arcenial. Niños, adultos, ancianos. Mucha destrucción al paso de los Hartnes.

No hay tiempo que perder, James está cerca.

 

     Después de mucho correr, finalmente llegan a una puerta de metal, no pequeña, pero tampoco demasiado grande. No hay manera de transportarse adentro, no pueden. Solo se puede derribar. Smoke y Shion se preparan.

Alguien aparece frente a ellos. Retroceden por la sorpresa.

 

Tierra: Esperen. *aun mirándolos, pone su mano izquierda en la puerta* Es muy gruesa… el material es resistente. *se voltea mirando la puerta*

Smoke: (¿Qué hace?)

Saidor: (Solo está James adentro, está bien…)

 

     Tierra, aún con la mano en la puerta, cierra los ojos y baja la cabeza. Respira profundo. Alza su puño derecho. Inhala. Exhala. Da un solo golpe a la puerta, y esta sale volando. Solo lo suficiente para que no llegara a golpear a James.

Ahí está.

     Al fondo de una habitación completamente congelada. Sentado en el suelo, con las rodillas alzadas y la mirada hacia abajo. Temblaba.

 

Shion: James. *corre hacia él* James *se arrodilla frente a él y coloca las manos en sus hombros* (tch- muy frío…)

 

Tierra: Todos entren.

 

     Los otros tres hermanos voltean a verlo. No dice nada más, tan solo entra, y ellos igual. Voltea a ver a la puerta. Alza las manos, y un trozo del suelo se levanta, cerrando el agujero que había dejado la puerta. El frío era casi insoportable.

 

Shion: James… Vamos, debemos irnos… *mira hacia abajo y nota una gema en las manos de James* qué… ¿Qué es eso?... *sacude la cabeza* vamos, vamos, hay que salir de aquí.

 

     James lentamente alza la mirada; sus ojos celestes, muy claros, y en sus mejillas se notaban pequeñas marcas, como si fueran rasguños. Sus lágrimas se congelaban casi al instante en que salían de sus ojos, y se deslizaban por su rostro, cortándolo.

     No hay tiempo. En cualquier momento los soldados llegarían.

     Shion se coloca a un lado de James y toma su brazo, para ponerlo alrededor de su cuello y ayudarlo a levantarse. Ya de pie, James lo abraza con fuerza. Llora. Sus lágrimas siguen congelándose, dejando marcas en las mejillas de James a su paso.

 

Shion: … James… vamos… debemos irnos de aquí. *lo suelta*

Tierra: Ya están aquí…

Smoke: (Maldición. Excelente) *invoca su oz*

Tierra: Quédense cerca. Haré lo mismo con esa puerta para alejar a los soldados. Necesitamos salir de aquí. (Ya no aguanto este frío… agh, necesitaré a Fuego un rato luego de esto.)

 

     Los cuatro hermanos y James se concentran detrás de Tierra, esperando a que éste hiciera su movimiento. Alza su puño derecho y lo lleva hacia atrás para prepararse. Golpea, y el metal sale volando hacia al frente. Algunas voces se escuchan quejarse al otro lado.

 

Tierra: ¡Ahora!

 

     Corren. Shion toma el brazo de James para llevarlo consigo, pero al hacerlo, la gema se le cae poco antes de salir de la habitación.

 

James: No ¡no! *se suelta de la mano de Shion, y corre de vuelta a buscar la gema. Se agacha y la toma en sus manos*

 

Click.

 

     Se paraliza. Ese sonido. Es inconfundible.

 

     Alza la mirada. Un arma apunta a su frente, a muy escasos centímetros de distancia. Ahí está él, apuntándole otra vez. Con la misma pistola conque disparó a sus padres. Lo sabía. La veía. No podía moverse, el miedo lo paralizó por completo. Los demás solo observaban. El más mínimo movimiento alertaría al hombre y dispararía.

 

     Pero ¿cómo llegó ahí? ¿Tan rápido?

 

     Una puerta dentro de la habitación.

 

¿?: Enserio que das problemas, niño.

Shion: (Maldición- James…) *mira al hombre*

¿?: Me sorprendes. *quita el seguro del arma y apunta a la gema*

James: ¡No! *se encoge, cubriéndola con su cuerpo*

¿?: *sonríe levemente*

James: Por favor… por favor…

Saidor: (Tenemos que hacer algo, se acercan más soldados.)

Shion: (Pero si nos movemos él disparará.)

 

     De repente, el arma sale volando para un lado. Sin preguntar, aprovechan el momento. Tierra aparece detrás del hombre antes de que este pudiera darse la vuelta, y con su gran mazo le da un fuerte golpe en la cabeza, matándolo. Shion se acerca rápidamente a James y lo ayuda a levantarse; él no se había movido en esos segundos que acabaron de pasar. Todos se reúnen.

Los soldados llegaron y les apuntan con sus armas, pero desaparecen antes de que pudieran hacer cualquier cosa.

 

     Fuera del laboratorio, en una parte del bosque cercana a la aldea, los seis aparecen. James es libre, pero él aún no responde.

Hace frío, mucho frío.

 

Shion: James… ya estás bien, estás a salvo.

James: *lo mira, sin decir nada*

Shion: … James…

 

-¡James!

 

     Escuchan dos voces a lo lejos. Todos, menos él, voltean a ver hacia el lugar de donde vinieron las voces. Sedrik y Hector corrían hacia ellos, y al llegar, abrazan a James con fuerza. Él no responde. Shion tan solo de aleja ligeramente.

 

Hector: *lo suelta* James…

Sedrik: … ¿Estás bien?...

Tierra: (Se veía… realmente aterrado cuando ese hombre le apuntó… demasiado…) deberían llevarlo a un lugar seguro para que descanse… tuvo que haber tenido un día muy difícil.

Hector: Sí… (¿qué le habrán hecho? ...) *baja ligeramente la mirada, notando la gema en las manos de James* (oh… no…) James… *vuelve a mirarlo, preocupado*

Sedrik: (¿Es…?)

Hector: (Sí…)

Sedrik: (Oh rayos…)

Shion: (Hm…) Vamos…

Tierra: Ya mis compañeros salieron. Debieron haber dejado mucho daño, tardarán un poco en recuperar el ejército.

Saidor: Está bien… *mira a Tierra* gracias.

Tierra: No hay de qué.

Saidor: *mira a sus hermanos* Vamos.

 

     Ellos asienten. Hector y Sedrik se miran entre sí. Todos, excepto el Hartnes, desaparecen del lugar. El lugar más cercano es la casa que Shion y James alquilaron. Es lo mejor por el momento.

     Al llegar, Sedrik ayuda a James a sentarse en el sofá de la sala y se sienta a su lado izquierdo. Hector a su lado derecho, mirándolo. Los demás, los cuatro hermanos, se acomodan en el sofá de enfrente. Todos en silencio. Muy silencioso.

 

Shion: James…

 

     Él solo se mantiene en completo silencio, mirando la gema rota en sus manos. De su boca no sale absolutamente ninguna palabra. Y eso preocupa mucho a su amigo Hector. Sabe muy bien lo que ha de estar sintiendo. Tener esa gema no le está haciendo nada bien. Si pudiera…

 

Hector: James… James, eso no te hace bien… *se acerca*

 

     Todos lo miran.

 

Hector: Deberías descansar. *acerca su mano a las de su amigo* Es mejor que duermas un poco… *cuidadosamente le quita la gema de las manos* anda-

James: Dámelo…

Hector: James, no es bueno para ti-

James: Dámelo.

Hector: Por favor, debes ir a descansar *aleja su mano con la gema*

James: Hector… dámelo… *sus manos comienzan a temblar*

Hector: James, tenerlo no te está haciendo bien. Créeme, lo sé-

James: Hector *voltea a verlo* ¡DÁMELO!

 

     Se paraliza. Sus ojos se abren como platos, más al ver los de James de un color totalmente diferente. De repente hace frío. Mucho frío. Jamás lo había visto así. No conocía a su amigo en ese estado.

Lentamente devuelve su mano, y James le arrebata la gema. Se levanta, y con un poco de dificultad camina. Se desploma en el suelo, y el frío se va.

 

Shion: ¡- ¡James! *se acerca a él y se arrodilla a su lado* James- (rayos) James… *intenta levantarlo*

 

     Saidor se levanta a ayuda a su hermano, y juntos llevan al James inconsciente a su habitación. La gema cayó en el suelo, y Hector la mira. Con miedo. Unos segundos después, se levanta y se acerca para recogerla. La mira muy atentamente; no hay nada que pueda hacer para recuperarla. No puede repararla.

 

     Cuando Shion y Saidor regresan, vuelven a acomodarse, y Hector se sienta nuevamente, con la mirada gacha.

 

Saidor: ¿Qué… fue eso?...

Hector: Esta… *respira profundo, luchando por no llorar* era la gema de su madre…

Shion: … (oh…)

Hector: Aún se siente que es de ella…

Saidor: ¿Los… padres de James?

Sedrik: Él los vio morir…

Hector: Esta marca *acaricia el borde del agujero en la gema* es de la bala… *se corta ligeramente el dedo* tch… *aparta su mano*

Shion: (Oh… James…)

Saidor: (Por eso se puso así… hmm)

Smoke: ¿Por qué de repente hizo tanto frío?

Hector: *se seca unas cuantas lágrimas con la otra mano* Es un Descendiente…

Sasuke: ¿Descendiente?

Sedrik: Híbrido Arcenial. Nos mostró su marca cuando estuvimos en su palacio, él controla el hielo… aunque parece que en realidad no lo controla bien.

Shion: Hm… hace un tiempo, vi que sus ojos cambiaron de color, y hacía frío.

Sedrik: Eso es lo raro… que sus ojos cambien de color...

Saidor: ¿No ha pasado antes en su raza?

Hector: No… nosotros somos Descendientes también, y no nos ha pasado.

Shion: Hm…

Saidor: Y… hm… ¿sabe por qué se lo llevaron a ese lugar?

Hector: … el… *respira hondo* el laboratorio…

Sedrik: Más o menos sabemos… cuando James escapó de la ciudad con Emily, lo estaban persiguiendo. James nos contó que lo han estado persiguiendo desde hace rato.

Shion: Sí… ese Darkale.

Hector: Hum…

Sedrik: En el laboratorio ellos- (rayos…) *mira a otro lado* ellos… *sus manos comenzaban a temblar* hacen… muchas cosas…

Hector: *mira a otro lado*

Sedrik: Experimentos…

 

     Sedrik se abraza a sí mismo. Los cuatro hermanos se miran entre sí. Pueden notar que a Sedrik y Hector no les gusta hablar de ese tema.

Hector parpadea varias veces, intentando ahuyentar las lágrimas que amenazaban con salir. El pecho se le aprieta, la respiración se acelera. La mente se vuelve un caos total para ambos hermanos. Hector se levanta y camina al baño, y allí se encierra. Solo logra recostarse de la puerta y cubrirse la boca. No aguanta el llanto.

 

Sedrik: Ese lugar es... es horrible... qué... ¿qué le hicieron a James?

Sasuke: Estaba encerrado en un cuarto de metal, todo estaba congelado… quizás por su propio poder.

Sedrik: *lo mira*

Sasuke: Es todo lo que pudimos ver.

Sedrik: Hum...

Shion: Ellos seguirán intentando atraparlo, ¿verdad?...

Sedrik: Sí… probablemente sí.

Shion: Pero, ¿cómo supieron que estaba aquí?

Sedrik: Darkale… él los guía, pero… no sé si tengan a más Arcenial de su lado…

Shion: ¿Más?...

Sedrik: No sé, solo… estoy divagando, perdón. *mira a otro lado* … también saben que Hector y yo estamos aquí… Darkale nos vio… y también buscan a James… maldición…

 

     Apoya los codos en sus piernas, y sujeta su cabeza con mas manos. Los cuatro hermanos vuelven a mirarse entre sí. No saben qué decir, la situación es realmente complicada, y podría incluso llegar hasta Celeradise, siendo que ellos comenzaron a vivir en el palacio. ¿Qué hacer?

Sedrik: Permiso. *se levanta y camina al baño* (Hector)

 

Saidor: (Esto es malo.)

Sasuke: (No podemos dejar que lleguen a Celeradise si los están siguiendo… pero tampoco podemos echarlos así por así…)

 

Sedrik: Hector *abre la puerta del baño, y encuentra a su hermano en el suelo, arañándose los brazos* Hector *apurado, se acerca a él y le toma las manos para detenerlo* tranquilo, tranquilo *lo abraza* tranquilo…

Hector: … per-dón… lo siento…

Sedrik: No, no te disculpes… yo tampoco quería recordarlo…

 

     Hector solloza, y lo abraza. Tiembla mucho. Recordar un evento tan traumático. Uno de los tantos. O todos de muchos. Recordar el encierro. Ese lugar, tan cerrado, tan oscuro. Y pensar que James estuvo allá.

Congelado. Todo estaba congelado. Con la gema rota de su fallecida madre en manos. ¿Cómo pueden ser tan crueles? ¿Qué les harían a ellos si los encontraran?

 

 

 

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     Abro los ojos lentamente. ¿Qué… es este lugar?...

 

     Lentamente me siento. Ya no hay dolor en mi pecho. La espada. Me llevo la mano al pecho, y no hay nada. Miro alrededor; estoy en un cuarto muy extraño, muy brillante…

 

James: Tch… *me llevo una mano a la cabeza* maldición… ¿dónde rayos estoy?... *me levanto. La cama era cómoda, muy suave* ¿Padiel?... *miro alrededor* (¿estará bien?...)

 

     La puerta se abre. Un chico de pelaje anaranjado entra.

 

Shion: James… ¿estás bien? *se acerca*

James: *doy un paso atrás* ¿James?... ¡- James *miro la cama. Está vacía*

Shion: … James, ¿estás bien?

James: *volteo a verlo* Tú… ¿quién eres?

Shion: … ¿qué?... James, ¿qué sucede?

James: Ese es el nombre de mi hijo. ¿Dónde está?

Shion: ¿Hijo?... ¿Qué?

 

 

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 Uff... intensita la cosa, ¿eh? u3uU súper breve y sin taanta importancia en realidad, pero logré introducir a los Hartnes <3 los cuales tendrán su momento de brillar en el cómic uwu a ver cuándo lo publico XDU Y. LO MÁS IMPORTANTE. ¿Qué rayos le pasó a James? :'o Aparte del alto trauma- ah x'DU bueno, espero que les haya gustado <3 me cometan qué tal les pareció.

Bai uwu

Capítulo 71

     Abro los ojos. Todo está borroso. Siento muchas náuseas y dolor de cabeza. ¿Dónde… estoy?... No puedo mover la cabeza. Parpadeo varias veces, para intentar enfocar mi vista, y poco a poco veo mejor, y escucho mejor. Hay varias personas frente a mí, todos vestidos con batas blancas, caminando de un lado para otro y hablando, pero no puedo entender lo que dicen todavía. Solo oigo murmullos. Intento moverme otra vez, pero es inútil. No puedo moverme.

 

     Cierto…

 

     Vuelvo a mirar el lugar; computadoras, personas con batas blancas. Este debe de ser el laboratorio de Denava. Estoy perdido. No voy a poder salir de aquí por más que lo intente.

     Un hombre se acerca a mí, pero no lleva bata blanca, sino un uniforme que parece ser de un rango alto militar. Muy poco conozco de la milicia de Denava, pero se puede notar que es de un rango muy alto.

 

???: Eres demasiado difícil de capturar, para ser un niño.

James: Humm… ¿quién… es?...

???: Soy el General de las Fuerzas Armadas Especiales de Denava. El señor presidente me encargó de traerte de vuelta. *se acerca a mi rostro* Lo que quiero saber es… ¿por qué tanta desesperación por traerte aun después de cinco años?... Tengo entendido que tu madre era una Leria.

James: ¿Qué…?

???: Hum *se aleja*… me informaron que recibiste una herida de bala en la cabeza mientras escapabas. Eso debió haber afectado tus recuerdos… pero no te preocupes, pronto te vamos a refrescar la memoria. *sonríe*

???2: Señor, ya estamos listos.

???: Muy bien. Entonces pueden comenzar.

James: ¿Qué?... ¿comenzar?...

???: Eres Descendiente. Tu marca indica que eres un Icyrus. ¿Qué tan fuertes son tus poderes?

James: Hum… no puedo siquiera controlarlos… ¿qué es lo que quieren?

???: Todo a su tiempo, niño. Por ahora, los primeros exámenes serán algo… dolorosos, si no te quedas quieto.

James: ¿Eh?...

 

     No me dice nada más. Solo se aleja y le dice algo en voz baja a uno de los de bata blanca, y luego se va. Ahora esa misma persona se acerca a mí con una jeringa en la mano. Más agujas. No quiero más. Estoy harto de que me entierren agujas, pero no puedo moverme, no puedo escapar. Cierro los ojos, y siento la aguja entrar en mi brazo. Duele, pero no se siente como si me estuvieran inyectando algo.

     Cuando saca la aguja, abro los ojos para ver qué hizo. El hombre ya se estaba alejando, y apenas llegué a ver la jeringa; me había sacado sangre. En esta situación, no quiero imaginarme qué podrían hacer con eso.

     Siento que me estoy moviendo, hasta que termino mirando al techo. Varias personas con bata se acercan y me rodean, junto con una máquina extraña, y la acercan a mi rostro. De la máquina salen algo parecido a cables, con algo circular al final, y esas cosas las pegan en varias partes de mi cabeza. Cierro los ojos. Ya no puedo hacer nada. Estoy perdido.

 

     Me duele la cabeza…

 

 

 

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          Después de sentir unos pequeños choques eléctricos en mi cabeza, al poco tiempo caí inconsciente. No tengo idea de qué pudieron haber hecho conmigo. No quiero saberlo. No quiero saber qué hacen aquí… pero, a la vez, sí quiero saber. Quiero saber qué hacían mis padres trabajando para el gobierno. Después de saber eso… no podían ser simplemente una secretaria y un asesor. Algo más está pasando aquí. Si todo lo que Hector y Sedrik dijeron es verdad, estaré muerto si no puedo salir de aquí.

     Estoy encerrado en una gran habitación con paredes metálicas. No puedo teletransportarme. Hay una pequeña pantalla que indica la temperatura, y se supone que está haciendo frío… 3°C. No puedo sentir nada. Estoy sentado en una esquina, abrazándome las piernas y con el rostro entre mis rodillas. No puedo teletransportarme. En el reflejo de una de las paredes, antes de que comenzara a congelarse, vi que mis ojos se habían vuelto celestes. Ya no sé qué hacer. Ya no puedo hacer nada.

 

     Escucho algo. Alzo la mirada. La puerta al otro lado del cuarto se abrió y un hombre entró. Camina hacia mí.

 

No puede ser…

 

No puede ser él.

 

¿?: Qué tal, muchacho… cuánto has crecido, eh. Y sí que has dado problemas… debí haberte matado cuando pude, por tu culpa yo también tuve muchos problemas para que me volvieran a aceptar.

James: … tú…

¿?: Sí te acuerdas, ¿verdad? Me dijeron que perdiste algunos recuerdos… que cosa que de mí aún te acuerdes.

 

     No puedo moverme. No puedo hablar. Todavía, como hace cinco años atrás, no puedo hacer nada contra él.

 

¿?: Me dijeron que te diera esto. *mete la mano en el bolsillo de su chaqueta, y de ahí saca una piedra azul, quebrada* Esto es tuyo. El resto lo enterraron no sé dónde.

James: … ¿qué?...

¿?: Ten. *lo extiende hacia mí* Es tuyo. Solo me dijeron que te lo diera. Apúrate, que hace demasiado frío aquí.

 

     Unos segundos después logro hacer que mi cuerpo responda. Me levanto lentamente. Me siento pesado. Me acerco a él. Soy más alto, pero me siento tan diminuto de nuevo frente a él… Extiendo mis manos, y él me da la piedra. Es tan ligera. La miro. Tiene un agujero enorme, donde entró la bala ese día.

No puedo moverme.

No puedo escuchar nada más.

 

     No sé si sigue aquí o si ya se fue. Las rodillas me tiemblan, las manos me tiemblan. No puedo más, me dejo caer. Lloro, pero siento como si mis lágrimas se congelaran y me cortaran las mejillas.

 

Mamá…

 

 

 

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     Abro los ojos. Todo está borroso. Siento muchas náuseas y dolor de cabeza. Intento levantarme, pero me siento pesado. Trato, hasta que logro apoyarme con los brazos.

James.

 

     Despierto de golpe y me levanto. Miro alrededor, agitado.

 

Shion: No, no, no… No, James… ts.

 

     Corro a la habitación de Emily y entro. Ella me mira apenas entro.

 

Emily: Shion, ¿qué pasó afuera?...

Shion: Yo- (nono, no puedo preocuparla con eso. Debo… distraerla). Nada, pequeña n.n ven, vamos a ir al palacio. *me acerco a la cama*

Emily: ¿Dónde está James?

Shion: *la cargo* (Rayos-) él tuvo que salir… vamos n.n te quedarás en el palacio un rato.

Emily: ¿Dónde está James?... ¿Se lo llevó el hombre malo otra vez?

Shion: … ¿Qué?...

Emily: James me dijo que ya estaba libre del hombre malo… ¿regresó y se lo llevó otra vez?

Shion: … Nono… no se lo ha llevado nadie, Emi n.n descuida… James está bien.

Emily: Hmm… James nunca me dice mentiras…

Shion: No, Emi… está bien, descuida… vamos al palacio.

Emily: Hmm…

 

     James siempre le dice la verdad, pero ¿cómo puedo explicarle que los soldados de esa ciudad se lo llevaron? ¿Cómo decirle que su hermano está en peligro?... no tengo la fuerza para eso. No soy tan fuerte.

     Salgo de la casa y la aseguro. Voy de camino al palacio. Mis hermanos pueden ayudarme, yo solo no podré, y menos… con un hijo.

 

     Fue tardado, pero al fin llego al palacio. Una vez entro, voy a la guardería y dejo a Emily con Mint, sin decir mucho más aparte que la cuide. Y de inmediato salgo a buscar a mis hermanos. Apenas puedo pensar, pero debo intentar calmarme. Pero me distraigo al encontrarme con Sedrik en un pasillo. Me detengo cuando él me habla.

 

Sedrik: ¿Hm? Oh, Shion nwn/ ¿y eso que estás acá? Pensé que estarías con James y- em, ¿dónde está él?

Shion: Yo-… (ts)

Sedrik: A esta hora él ya ha terminado su trabajo comunitario, ¿no?

Shion: S-se llevaron a James…

Sedrik: ¿Ah?

Shion: Se lo llevaron, esos- esos soldados, y-

Sedrik: ¿Soldados?... ¿los de… Denava?...

Shion: S-sí…

Sedrik: Ay no… ¿Ha-hace cuánto tiempo? *se ve desesperado*

Shion: No lo sé… me sedaron, no sé cuánto tiempo pasó.

Sedrik: Hay que ir- hay que- hum… *mira hacia otro lado, y se ve que se agita su respiración* hay que ir ya, al… laboratorio.

Shion: … ¿Qué le harán allá?

Sedrik: Hay que ir, YA. *corre*

Shion: (James… ts. ¡Smoke! ¡Saidor, Sasuke!)

 

     Corro. No puedo perder tiempo en nada. Me transporto a la habitación de Smoke y ahí lo encuentro. Unos segundos después Saidor y Sasuke aparecen con nosotros.

 

Saidor: Shion, ¿qué pasó?

Shion: Es- (tranquilo) James.

Smoke: Hum, ¿qué solo sabe meterse en problemas?

Shion: N-no, no, no es su culpa. Unos soldados, de la ciudad de donde viene, lo secuestraron.

Saidor: Hum… ¿sabes dónde lo llevan?

Shion: Yo… no…

Saidor: Así no podemos hacer mucho.

Shion: … sus amigos han de saber.

Saidor: ¿Sí?

Shion: Sí sí, este… Sedrik, decía que debemos ir ya. Parecía muy asustado… le pueden hacer algo a James…

Smoke: *suspira* Vamos *camina a la puerta*

Sasuke: Sí, será mejor apurarnos, si puede que le hagan daño.

Shion: Sí… sí. Vamos.

 

     Los cuatro salimos de la habitación. En el pasillo ya estaban Hector y Sedrik, ambos se veían bastante preocupados, y yo intento calmarme lo más que puedo.

 

Sedrik: Shion, tenemos que apurarnos.

Sasuke: ¿Dónde es ese lugar?

Sedrik: Solo- vamos. Los guiaremos. No hay tiempo.

Sasuke: Bueno… vamos.

 

     Salimos del palacio y nos movemos lo más rápido posible. Está muy lejos, ninguno puede llegar a sentir la energía de James. Hector y Sedrik saben a dónde se lo llevaron, así que se acercan a nosotros y nos hacen transportarnos. Al llegar, vemos que estamos en un bosque no muy denso, bastante claro. Miro hacia ellos, y ambos están apoyados el uno del otro, respirando de forma entrecortada.

 

Sedrik: Perdón… ya… *se levanta mejor, al igual que Hector* vamos… es hacia allá *señala con su dedo, por encima de las copas de los árboles se asomaba una pared de concreto* al otro lado del muro está el… laboratorio.

Hector: Está siempre vigilado… deben… tener mucho cuidado para entrar y salir.

Saidor: ¿Ustedes saben cómo entrar?

Sedrik: No…  no realmente.

Saidor: Hum… bueno, nos toca averiguarlo. Vamos. *comienza a caminar, y nosotros lo seguimos*

Hector: Esperen.

*nos detenemos y volteamos a verlo*

Hector: De verdad… tengan mucho cuidado… si- si ven algo en ustedes que les pueda interesar, ellos… ellos los van a cazar. No se van a detener hasta capturarlos.

Shion: (Hm…)

Saidor: Está bien n.n seremos cuidadosos. Ustedes… ¿se quedarán aquí?

Hector: *asiente*

Saidor: Bien… cuídense.

Hector: También ustedes…

 

     Saidor asiente. Ahora sí, los cuatro nos dirigimos hacia el lugar que nos señalaron. Nuestro plan es entrar lo más sigilosos posible, para así evitar ser vistos y tener que luchar contra ellos. Hector y Sedrik parecían muy preocupados porque tengamos de entrar. Pero debo sacar a Janes de ahí…

 

     Mientras los ven irse, los hermanos se quedan parados, abrazados. Hector con el rostro escondido en el pecho de su hermano. El simple hecho de pensar en ese lugar es aterrorizante. Y pensar que su mejor amigo está ahora en la misma situación es horrible. Pero los recuerdos le nublan la mente, lo suficiente para no poder moverse más de donde están, más cerca del infierno en el que vivieron a tan temprana edad. No pueden hacer nada más.

 

???: ¿Sedrik?... ¿Hector?

 

     Ambos voltean a ver hacia la voz que los llamó. Algo confundidos, pues no reconocían a esa persona. Pero él a ellos sí.

 

???: *sonríe* Chicos… enserio son ustedes. *se acerca* Soy Tierra… aunque muy probablemente no me recuerden…

Hector: … usted…

Tierra: Supongo que han de tener muy vagos recuerdos de cuando vivían en la aldea. Está bien, solo… me alegra mucho ver que están bien, pero… ¿qué hacen aquí? ¿Cómo salieron de la ciudad?

Sedrik: Am… bueno…

Tierra: Oh… rayos, lo siento, lo siento. Me emocioné un poco… *respira hondo* perdón…

Hector: Mamá nos habló de usted…

Tierra: Oh, ¿de verdad?

Hector: Sí…

Tierra: Oh, me alegra que me recuerden *sonríe* ha pasado tiempo desde la última vez que me acerqué para su hechizo de camuflaje. Pero… ¿qué hacen aquí?... Tan cerca del muro…

Sedrik: … *baja la mirada* un amigo de nosotros… lo llevaron allá.

Tierra: Oh…

Sedrik: Queríamos ir a ayudar, pero… no- no podemos-

Tierra: Está bien. Tranquilos. Puedo entender que no quieran entrar. Está completamente bien… ¿Quién entró?

Hector: Los… bueno, el novio y los cuñados de nuestro amigo.

Tierra: ¿Cuántos son?

Hector: Tres.

Tierra: ¿Cómo es su amigo?

Sedrik: Es-… ¿va a entrar?

Tierra: Conozco bien el lugar. Seguramente quienes entraron no. Van a necesitar ayuda para entrar sin llamar mucho la atención.

Sedrik: Pero-

Tierra: Descuiden. Es mi trabajo ayudar. *comienza a caminar* Ustedes vayan a la aldea. Estarán más seguros allá.

 

     Y desaparece.

 

 

 

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     Ya es la hora de salida, y Kilian se prepara para regresar a su casa, y pasar el resto del día con su novio. Se despide de su jefe y sus compañeros, y sale del taller para tomar un autobús hacia su casa. En el camino, saca su celular por un momento para avisarle a Norbert por mensaje que ya está en camino, y que le diga a su madre también. Se coloca los audífonos para escuchar algo de música en lo que queda de camino.

     Una vez llega a su parada, paga su pasaje y baja del bus. Camina de vuelta a su hogar. La misma rutina desde que empezó a trabajar, y piensa algún día cambiar. Al llegar a casa abre la puerta y entra.

 

Kilian: Buenas n.n

Norbert: *en la sala, jugando. Lo mira y sonríe* Hola nwn ¿qué tal te fue?

Kilian: Bastante bien n.n

Denny: *desde la cocina* Hola, mi hijo.

Kilian: *se acerca a Norbert para darle un pequeño beso en la mejilla, para luego ir a la cocina con su madre* Hola mamá n.n

Denny: ¿Cómo te fue en el trabajo?

Kilian: Bien bien n.n ya extrañaba ir al taller, jeje.

Denny: *sonríe* Todavía te gusta mucho la mecánica.

Kilian: Sí, je.

Denny: Bueno, anda a bañarte. Ya está casi lista tu comida.

Kilian: Está bien.

 

     Primero se dirige a su cuarto, donde deja su celular y su billetera, se desviste y se cubre con una toalla. El overol y la camisa los deja en la canasta de ropa sucia, y va al baño. Se comenzaba a sentir nervioso, debía hablar con Norbert, pero no sabía cómo sacaría el tema.

 

     Veinte minutos después está listo. Cabello lavado y ropa limpia. Sale de su habitación para ir al comedor, donde su novio y un buen plato de comida hecha por su madre ya lo esperaban. Norbert tranquilo con el celular. Se acerca a la mesa y se sienta, y Norbert guarda el celular al notarlo llegar.

 

Kilian: ¿Y mi mamá?

Norbert: Salió a comprar unas cosas.

Kilian: Ah vale. *empieza a comer* ¿Ya almorzaste?

Norbert: Ajá, pero te estaba esperando para comer otra vez uwu

Kilian: Je, vaya, qué considerado.

Norbert: uwu… es broma XD solo quería acompañarte.

Kilian: Seguuro *toma una buena cucharada y acerca el bocado a la boca de Norbert* ten.

Norbert: Hmmm… *lo come* ya ya, tú debes tener hambre después de trabajar todo el día.

Kilian: Je, pues sí, pero quería hacer eso.

Norbert: *sonríe, apenado* Je…

Kilian: Oye… quería preguntarte algo…

Norbert: *lo mira* ¿Qué cosa?

Kilian: Bueno… recuerdas que te pregunté si querías vivir conmigo.

Norbert: (Oh- hmm) Sí (sí quiero- pero… ash)

Kilian: No sé, no sé por qué he estado pensando tanto en eso… pero, bueno, se me hace lindo imaginarme cómo sería nuestra vida viviendo juntos.

Norbert: Hum… *mira a otro lado*

Kilian: ¿Qué pasa?...

Norbert: Nada, nada…

Kilian: Norbeeert… puedes decirme, lo que sea que sientas.

Norbert: *lo mira, y vuelve a desviar la mirada*

Kilian: Hm… Norbert, te amo, enserio…

Norbert: Y yo a ti, Kilian, mucho, de verdad. Es que… no sé… es un… cambio muy drástico.

Kilian: Sí… lo sé, rayos *baja su mirada*… perdón.

Norbert: *lo mira*

Kilian: Es que… je *sonríe levemente* me emociona la idea… quizás estoy yendo muy rápido n.ñU

Norbert: Hmm… (ay…) sí quiero… pero…

Kilian: *lo mira*

Norbert: No sé… (no sé por qué me da miedo…)

Kilian: *lleva una mano a la mejilla de Norbert para acariciarla* Tranquilo. No te preocupes.

Norbert: (Sí quiero…)

Kilian: *sonríe levemente* Más tiempo, entiendo.

Norbert: (Ay… ¿por qué tiene que ser tan lindo?)

 

     Lo suelta para terminar de comer. Es una conversación que deberán dejar para otro momento.

 

 

 

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¡Aquí yo otra vez! :D Me tomé otro buen tiempo, pero andaba con clases y eso me tenía estresada y sin inspiración x'd pero ¡aquí estoy! <3 ¿Qué tal les pareció el capítulo? Díganme en los comentarios uwu me inspira a seguir <3 me han estado dando ideas, así que esta historia todavía da para rato, como esta cuarentena uwu (?

¡Nos leemos luego! :D